EL CONGRESO SE HA CONVERTIDO EN UN PODER SORDO, CIEGO Y SUMISO: GINA CRUZ 

• Es nuevamente una oficialía de partes del Ejecutivo
• Se han negado al parlamento abierto
• Pondrán a los jóvenes a merced de una sistema de terrorismo fiscal

La senadora por Baja California, Gina Andrea Cruz Blackledge, manifestó que el Congreso, cuya esencia y naturaleza es el diálogo y el debate, se ha convertido en un Poder sordo, ciego y sumiso, además se volverse nuevamente una oficialía de partes del Ejecutivo, que aprueba sus propuestas de forma automática y sin argumentos.

Al tomar la tribuna, la también presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte del Senado de la República, presentó un posicionamiento respecto a la miscelánea fiscal 2022 que se discutía esta mañana en la máxima tribuna del país.

“Al sólo obedecer a mandatos mañaneros y a ocurrencias ideológicas, el Senado está renunciado así a su función esencial de controlar la legalidad y la constitucionalidad de lo que aprobaremos”.

“Han hecho historia ante la Nación al aprobar leyes, que después se demuestra que son inconstitucionales. Han hecho historia al no apoyar a la ciudadanía en medio de la peor pandemia. Han hecho historia al cerrarse a la sociedad, convirtiéndonos en un Poder “autónomo” que sólo obedece a otro Poder”.

Gina Cruz expuso que la discusión que inicia con esta Miscelánea Fiscal será estéril, en la medida en que la mayoría silenciosa y obediente no esté dispuesta a modificar aquello que hemos señalado que no beneficia al pueblo de México, y que, al contrario, transfiere a la sociedad costos que debería asumir el sector gubernamental.

“Están a punto de aprobar el más brutal terrorismo fiscal, ese que se comete contra toda aquella persona que entra en la mayoría de edad, en muchas ocasiones sin recursos ni empleo y prácticamente sin cultura financiera”, advirtió.

También se está castigando al sector productivo por sus actividades solidarias, y al campo, sector en el que este gobierno sólo ha acertado a generar más pobreza y marginación, observó.

“Con la miscelánea fiscal, destruirán redes solidarias, tejido y capitales sociales y seguirán hundiendo al campo en la pobreza”.

“La miscelánea fiscal que hoy se aprobará, a pesar de la falta de acuerdos, es una pésima señal para una economía que no se ha podido recuperar del desastre orquestado por este mismo gobierno y que se agravó por causa de la pandemia”.

Gina Cruz expuso que el paquete económico para el año 2022 no es la excepción a la larga serie de errores gubernamentales de política pública, y de leyes aprobadas al vapor que han sido impugnadas ante jueces, magistrados y ministros.

La tónica de este gobierno ha sido gastar más y gastar mal. De forma criminal se han tirado enormes cantidades de recursos presupuestales en proyectos sin viabilidad técnica y que no generan valor agregado ni forman capital, aseveró la legisladora por Baja California.

“En Acción Nacional apostamos, en este entorno de postpandemia, por el apoyo decidido a las personas, a las familias y a las empresas. Por ello hemos propuesto un ingreso básico universal cuyo objetivo es evitar que cada día más personas caigan en la pobreza”.

Vemos con tristeza que, en lugar de apoyar a las y los jóvenes que son uno de los sectores más afectados por la pandemia, los pretenden convertir en rehenes de un sistema tributario cruel y persecutorio.

Gina Cruz comentó que en lugar de generar incentivos fiscales para restauranteros, de hacer deducibles gastos médicos y colegiaturas, buscan ahorcar aún más a una sociedad castigada por su pésimo manejo de la pandemia, por sus terribles resultados en seguridad y por su irresponsable manejo de la economía.

Y del apoyo a las y los productores, ni hablar tan siquiera, ya que se han negado a apoyar a nuestras empresas que, por lo menos en los ramos de la cerveza artesanal y el vino son sujetos de doble tributación.

“La tónica de esta cuarta transformación es gastar más y gastar mal, tirar recursos públicos en proyectos faraónicos y en empresas quebradas. Y para ello, cada año que pasa, generan nuevos esquemas impositivos que castigan a las y los contribuyentes cautivos”.

“Esta lógica de terrorismo fiscal generalizado se complementa con una perversión adicional: el intento de acabar con la solidaridad que nace, de forma espontánea, de la propia sociedad civil”.